IMPORTANCIA DE LA CORRECTA SEPARACIÓN DE LOS RESIDUOS
El aumento desmedido de la generación de residuos sólidos, ha conllevado a que se generan problemáticas como los son la inadecuada disposición de los residuos en vertederos o la incineración a cielo abierto, el no aprovechamiento o valorización de los residuos mediante procesos de reciclaje o compostaje y la disposición final inadecuada de los residuos peligrosos y especiales, escenarios que acentúan un notable deterioro al medio ambiente.
La Revolución Industrial fue uno de los factores mas relevantes para el incremento exponencial y desmesurado de la población mundial, lo cual ocasiono un inevitable aumento en el consumo de recursos y una producción de residuos, conjuntamente con la industrialización se generaron productos de consumo difíciles de degradar que, al ser dispuestos equivocadamente, causan la contaminación del agua, suelo y aire, además de problemas a la salud de los seres vivos.
El no poder recuperar el residuo para luego reutilizarlo o reciclarlo es uno de los principales problemas que se presentan, y esto se debe a la falta de sensibilización, concientización y campañas de educación ambiental sobre la importancia de la separación en la fuente, lo cual permitiría rediseñar estrategias que contribuyan a valorizar los residuos de manera eficiente.
Lo anterior es importante ya que el 79% de los residuos dispuestos son aprovechables, sin embargo, solo se están recuperando y reinsertando a la cadena de valor el 20% de estos materiales, por lo cual los problemas ambientales están fuertemente relacionados con la gestión inadecuada de los residuos sólidos. Esto se puede explicar dado que la generación de residuos aumenta debido a que no se cumplen los protocolos para prevenir y minimizar la generación de los mismos, ahora el indicador de reciclaje evidencia que no se realiza la gestión de reusó, reciclaje y reutilización, por lo que se tiene una mayor cantidad de residuos solidos a tratar y a disponer en el mejor de los casos en relleno sanitario. Cabe mencionar que los rellenos sanitarios producen varios problemas ambientales concretos como: La generación de lixiviados altamente tóxicos que contienen materiales como plomo, cadmio, níquel, arsénico, entre otros metales, lo cuales, por fisuras o rompimiento de la membrana, se pueden generar perdidas de lixiviados ocasionando contaminación de los cuerpos de agua, tanto subterráneos como superficiales.
Así que, los rellenos sanitarios se podrán considerar como una gestión final adecuada, solo cuando se garantice la recuperación y reutilización de ciertos productos que podrían generar valor agregado ya sea por, reciclar los residuos inorgánicos para recircular o reinsertar estos de nuevo en el ciclo de producción o por realizar procesos de generación de energía a partir de ellos, optimizando la vida útil de los rellenos.
De tal manera que es evidente que se requiere de medidas pertinentes y urgentes en la gestión del manejo adecuado de los residuos sólidos, por ello es indispensable motivar un enfoque no solo en función a una disposición final de estos, sino de considerar el manejo de los residuos sólidos como una fuente de materia prima, optimizando el aprovechamiento y valorización de estos, con el fin de lograr una disminución en el volumen de residuos a disponer y una racionalización del uso de los recursos naturales.
Es importante recordar que de acuerdo a la Resolución 2184 de 2019 desde el 1 de enero del año 2021 inicio a regir el nuevo código de colores para la separación de residuos, con lo cual se busca que el proceso de recolección, aprovechamiento y tratamiento de residuos sea de forma mas eficiente, incrementando el índice de separación en la fuente.
De acuerdo a la Resolución la separación de residuos se debe de realizar mediante el uso de tres colores de bolsas o recipientes, como a continuación se relaciona.
Blanco: residuos aprovechables limpios y secos, como plástico, vidrio, metales, papel y cartón.
Negro: residuos no aprovechables como el papel higiénico; servilletas, papeles y cartones contaminados con comida; papeles metalizados, entre otros. En esta bolsa o recipiente también deberán disponerse los residuos COVID-19 como tapabocas, guantes, entre otros.
Verde: residuos orgánicos aprovechables como los restos de comida, residuos de corte de césped y poda de jardín, etc.